Se levantó
De mañana
Dejó las ovejas al cuidado de alguien
Como Isaí le había mandado
David fue diligente en su labor. Te comparto sinónimos de “diligente”: esmerado, activo, emprendedor, enérgico, dinámico, cuidadoso… y la lista sigue.
¿Eres confiable? ¿Eres recomendable? ¿Eres responsable? Siempre hay alguien que te está mirando. Sé fiel en lo poco y Dios te pondrá sobre mucho. Así como David respondió ante el pedido de su padre terrenal, del mismo modo, posteriormente respondería ante los pedidos de su Padre Celestial. Y el Señor le confió el cuidado de una nación.
Te comparto dos historias que contrastan en cuanto a diligencia hacia la Obra del Señor. Nosotros los miércoles tenemos grupo de Discipulado en la iglesia y mamá (que es una de las líderes de grupo) estaba con un problema de dolor en una muela. Llamó por teléfono y pidió turno con su odontóloga y le ofrecieron el miércoles por la tarde. Ella respondió. “No, porque tengo un compromiso en la iglesia”, fue su respuesta.
Se trata del cuidado de almas, no de una simple clase teórica. En el lado opuesto están aquellas personas que presentan las siguientes excusas para ausentarse de una reunión de adoración: aniversario de matrimonio o de novios o cumpleaños, o por salidas familiares, o por un partido de fútbol, en fin. No le demos las migajas a Dios. Te desafío a que reconsideres tus prioridades, para transitar un año que valga la pena y sea invertido para darle la Gloria a Dios, sirviéndole con pasión, fervor y diligencia.
“Si no sirves a Dios donde estás no lo servirás en ningún otro lado.” Anímate, atrévete, sé osado, corre riesgos por Dios. Si no es ahora, ¿cuándo? ¡Hagamos que este año cuente para la eternidad!
”Amado Padre, estoy tan agradecida por todo tu amor que no merezco. Permíteme regresarlo con una vida de servicio, apasionada y diligentemente para llevar honra a Tu Nombre, y llevar fruto por la eternidad, en el maravilloso nombre de Jesús”.