La sexualidad suele ser un tabú en nuestros contextos y hay muchas dudas que sería bueno clarificarlas y resolverlas en un ambiente saludable y espiritual.
Como terapeuta con veintitrés años de experiencia entiendo que cuando se trata de menores, los padres son los que tienen la responsabilidad y el rol primario en la educación sexual. La iglesia, muy bien puede ser un extraordinario recurso de apoyo y de ayuda al hogar.
En el plano de lo que es ideal la educación sexual en la iglesia debe ser provista por profesionales preparados en el área. Cada vez más son las personas que se preparan en los campos de la conducta humana y son cristianos. Ellos son los recursos óptimos para trasmitir el mensaje con conocimiento científico y a la vez espiritual.
La Biblia desde la antigüedad abarca las distintas áreas del ser humano tanto en lo social, sexual, político, financiero, familiar y moral. Creo que es imprescindible y muy oportuno trabajar el tema enfocado en el matrimonio y siempre desde el respeto y la pureza. La sexualidad es un regalo de Dios.
Otros temas que se pueden tocar son la higiene, las enfermedades venéreas, la prevención del cáncer de cuello uterino, próstata, disfunción eréctil, monotonía en la intimidad, prepararse para la primera relación sexual y la importancia de la frecuencia del sexo en un matrimonio.
He tenido la experiencia donde matrimonios me han verbalizado que la primera vez que fueron orientados sobre sexo fue en un taller en la iglesia. Me alegra mucho que cada vez haya más apertura de este tema en las comunidades de fe porque el sexo es importante para el matrimonio. Una de las causas comunes de divorcio es insatisfacción en el sexo.
¿Por qué el sexo es importante en el matrimonio?
⁃Implica sensación de apoyo.
⁃Conexión para la pareja.
⁃Contribuye a la salud física.
⁃Es un mecanismo de relajación mental.
⁃Mayores niveles de satisfacción con la relación.
Ilustración: Juan E. Pérez