En breves palabras, ¿qué es PresiDante?
Una conferencia que dura dos horas, y que pasa por varias estaciones de la vida; partiendo de la premisa de lo que haría, “si fuese presidente por un día”, sea la nación que fuere. Y a partir de esa hipótesis, y en complicidad con el público, pasamos por la nostalgia, muchas lágrimas, mucha risa, y obviamente, un encuentro con el Señor; pero se va dando de manera orgánica. Es lo más evangelístico que hice en muchísimo tiempo. Arrancamos con dos funciones en el Luna Park y seguimos por 40 ciudades del mundo. Hasta el momento, ha sido un fenómeno imparable y esperemos que siga así. Haremos el Movistar Arena de Bogotá, el Auditorio Nacional de México, el Radio City de New York, entre otros.
¿Cómo explicas este fenómeno que se da en países como, por ejemplo, República Dominicana o El Salvador, donde las tres presentaciones tienen sus tickets agotados desde dos meses antes del show?
No sólo eso, en la mayoría de los países, se agotaron en menos de dos horas del lanzamiento. ¡Es una locura! Obviamente los productores locales siempre nos piden más presentaciones, que abramos un día más, pero es imposible hacer más de dos, máximo tres funciones, porque siempre tengo que regresar los domingos a River Arena, además de las grabaciones para el programa de Canal 9, lo cual es una maratón, pero vale el esfuerzo.
En la Argentina estás con un proyecto que ya lleva dos años y también tiene un singular éxito, tu programa televisivo “La Divina Noche”. Y una de las secciones más populares es la del monólogo retro. ¿Crees que hay una necesidad de la gente de volver a lo de antes? ¿Hay intención de ir en esa dirección o sólo la concebiste como una apertura divertida para romper el hielo?
Necesitaba un patrón, un hilo conductor que uniera todos los monólogos; y la nostalgia o el apelar al “éramos felices y no nos dimos cuenta” me permite tener un riel, una manera de agregar temas como si fuesen vagones y siempre con un denominador común. Además, obviamente, la nostalgia une varias generaciones y es un excelente disparador para el humor.
Tus invitados abarcan un amplio abanico de edades, nacionalidades, profesiones, status social, etc. Uno imagina que, de todos estos personajes, sacas algo, pero… ¿cuál sería un denominador común cuando haces un balance de todos los entrevistados que tuviste?
Que todos pueden ser ellos mismos. Trato de crear un clima en el cual se sientan cómodos, y que no estén esperando la zancadilla periodística, y eso hace que se relajen y cuenten cosas que normalmente no harían en otro medio. Nos propusimos no buscar el título o el videograph.
Y fundamentalmente, no estoy tratando de lucirme por encima del entrevistado, tengo siempre presente que es su noche, su momento; yo sólo escucho y sigo la línea del relato de lo que me va contando.
Se te ve en tantos lugares que hay gente que sospecha que tienes un clon que desarrolla las tareas sociales de River Arena mientras el Dante original está grabando para la televisión argentina. ¿Cómo haces para repartirte entre tantas tareas que, es evidente, llevan mucho tiempo de planificación y ejecución?
Las tareas sociales, los viajes misioneros, la atención personalizada en River, y la administración legal y financiera la lleva adelante un equipo formidable; yo no tengo que estar ahí.
Hay 12 pastores en planta, (entre ellos un CEO ejecutivo que es mi segundo a bordo) más de 80 empleados y 600 voluntarios que hacen todo el trabajo. Parece que yo hiciera mucho, pero solo estoy enfocado en tres cosas: los mensajes semanales de River Arena que salen al mundo; el programa de televisión de Canal 9 (que se emiten por Vix de Univisión) y el Tour Presidante.
Fuera de eso, todo es delegado en un enorme equipo de profesionales.
¿Qué pasa por la cabeza de Dante Gebel cada vez que el enorme camión azul de River Ligthouse se aleja vacío del lugar donde terminó de cambiarle la vida a una familia?
Fue por esto que me metí en los negocios del Reino; es lo que siempre supe que se podía hacer; sólo por esto, volvería a vivir todo lo que viví.
Volvamos a PresiDante. En Argentina es año electoral. Los políticos se están matando en las internas del mismo partido y sólo en la imaginación cabe lo que será la campaña previa a las elecciones definitivas. Imagino que no es casual el nombre del show…
Te cuento algo que será una primicia, puesto que no lo había dicho antes. Antes de cerrar las listas, recibí la propuesta formal de postularme como Gobernador de la Provincia de Buenos Aires para el equipo de Javier Milei. Obviamente, me sentí honrado que contaran conmigo, pero decliné la oferta. Pero te cuento esta infidencia, sólo para decirte que no descarto en algún futuro, hacer algo por mi país, en la medida de mis posibilidades y conforme la providencia Divina. Con Dios en el equipo, no descarto nada. Pero Presidante, el Tour, no tiene que ver con alguna aspiración política, sólo el juego de palabras y la consigna, el punto de partida para la conferencia.
Para cerrar, y ya que hablamos en términos electorales, ¿habrá segunda vuelta de PresiDante en Argentina?
Este año, aprovechando que estaré en Chile, creo que haremos Córdoba o Mendoza; pero dudo que regrese a Buenos Aires, al menos hasta 2024.
