Soy hijo de madre oriunda de Tucumán y padre de Santiago del Estero, ambas provincias del norte de la República Argentina. Crecí escuchando todo tipo de género de música. Y obviamente se escuchaba mucho el folklore argentino.
Hay una canción titulada “Mucho bla bla compañero”, de Argentino Luna, quien fue un cantautor representante de la música folklórica de mi país.
Según la Real Academia Española, “bla bla” significa: “Discurso largo y sin sustancia, y a veces con tonterías o desatinos”.
Pensaba en cuánto nos gusta hablar a muchos de nosotros. Y en mi caso aún más, al estar en medios de comunicación. Pero debo reconocer que en muchas ocasiones, hablamos mucho y hacemos muy poco.
Me atrapó el texto de Hechos 1:1 en el cual Lucas, el evangelista y médico, le dice a Teófilo, que en su primer libro le había relatado lo que Jesús comenzó a hacer y a enseñar. ¡Que tremendo, Jesús! Primero “hacía” y luego enseñaba. Sus hechos eran tan fuertes como sus palabras. O quizás sus palabras sonaban tan fuertes, porque sus hechos lo eran.
En ocasiones, cuando no creían a sus palabras, Él mismo les decía: “Si no me creen a mí, crean a mis obras”. Les mostraba sus hechos.
Pensemos en esto. Imitemos a nuestro maestro. Y recordemos que nos dio el ejemplo, para hacer como Él hizo.
“Padre, ayúdanos a hablar menos y hacer más. Que nuestros hechos hablen más fuerte que nuestras palabras”.